En su carácter de factor social, el derecho
constituye un aspecto de control social. El es para Ross, el instrumento mas
especializado y mas altamente terminado, se ese control que la sociedad emplea
sobre sus miembros para asegurar su subsistencia.
La idea del “control social”, debida al sociólogo
norteamericano Edward A. Ross, ha gozado de mucho favor en el campo de la
sociología. La sociedad supone, para existir, un control; una situación
coherente para cuyo mantenimiento funcionan fuerzas diversas, en dirección
centrípeta, que mantienen a los individuos dentro del grupo y aseguran su
movimiento, en forma semejante a como lo hace en el campo físico la fuerza de
la gravedad.
Esta idea no carece de precedentes en la misma
sociología. Fácil es emparentarla, en cuanto a su resultado, con la idea
Comtiana del consensus social, que representa el equilibrio. Y en cuanto a sus
medios de presión colectiva, recuerda la idea de la coacción social, con el constreñimiento
del hecho colectivo, en la que Emile Durkheim puso la base misma de los hechos
sociales, el hecho social fundamental.
Entre las
principales manifestaciones del control social se señalan:
a) La religión, la moral y el derecho, como normas de
cumplimiento exigido por su propia esencia. b) La costumbre, la moda, la etiqueta, los usos sociales en general, que aunque no obligan en si mismos, se imponen como manifestaciones de uniformidad de conducta en la vida de una colectividad dada.
c) La educación y la opinión publica, auxiliada por la propaganda, que constituyen el resorte psicológico de la uniformidad.
De allí que sociólogos como Vinogradoff, Ehrlich,
Timasheff y aun Gurvitch, usen el termino de “Derecho” para designar, si no el
“control social” entero, a lo menos “la mayor parte de los procesos de que se
compone el control social”.
Del control social en su sentido genérico derivan la
conformidad y la expectación. El derecho como forma del control social, provoca
en la conducta de los hombres, las mismas consecuencias. En efecto:
a) En virtud de la conformidad, acotamos las normas
vigentes y adaptamos a ellas, en general nuestra conducta. La transgresión es
la excepción, pues de otro modo la norma jurídica dejaría de serlo. El hombre
aun cuando tenga también brotes
antisociales, tiene una tendencia natural a cumplir el derecho. Solo
esta razón social explicaría la presunción legal (que unos autores modernos
consideran “ficción”) de que los ciudadanos conocen la ley.
b) En virtud de la expectación, esperamos que esa misma
conducta sea acatada por los demás y que estos obren en consecuencia. Sin tal
expectación, la vida social sería imposible. La base del derecho de
obligaciones es legitima expectación de que los demas cumplirán la palabra
empeñada.
En
resumen, el derecho como forma del “control social” no solo “constriñe” a obrar
de una manera dada. Orienta y uniforma la conducta y nos permite esperar que
los demás actúen jurídicamente.
El
Control Social, Historia del Concepto:
El
control Social nace para lograr la igualdad del
individuo en la sociedad, es principalmente con ideas y valores, es decir, con
actitudes como el uso de la vigilancia del correcto funcionamiento del ente
social se tiende a una moral libre, opcional, personalizada.
Control Social:
Es la capacidad de la sociedad para regularse asimismo
de acuerdo a principios y valores aceptados mayoritariamente, tiene dos
objetivos: regular la conducta individual y conformar y mantener la
organización social. Se ejerce sobre los individuos con la finalidad de
enseñarles, percudirlos y compelerlos a usar los valores aceptados por el
grupo, con la finalidad última de lograr una disciplina social que resulte
funcional para el mantenimiento de las estructuras del Estado. Y éste debe
tratar de mantener o crear las condiciones para la armonía social.
Control
social: También puede definirse como el agregado de mecanismo
a través de los cuales el orden institucional, obrando en defensa y protección
de sus propios intereses, buscar el mantenimiento del status quo, que no es
otra cosa que el mantenimiento de determinado estado de cosas en el ámbito
económico, político y social.
Entonces podemos definir a modo de conclusión que el Control Social es defender ese estado
social que interesa a quienes controlan el poder, los que se encuentran
obviamente interesado en preservar y defender el status quo social.
El criminólogo italiano Pavarini, nos dice que el control social puede ser examinado como
cuestión política y es leído a través de categorías politológicas y jurídicas,
como los del Poder dominio, Estado, Derecho, Represión, Autoridad y como
categoría sociológica el control social es interpretado como Integración social
y socialización de una dimensión social.
Para
que los ciudadanos acepten las normas del control social se requiere de un
cierto grado de legitimidad de la autoridad que dicta la norma y de legitimidad
del contenido de las mismas.
Legitimidad
equivale a aceptación por parte de la mayoría de los integrantes de la
sociedad.
Supuestos controles sobre la Vida
Humana
Hombre = Ser Moral
Dice
Luis Recasens Siches: “El ser humano no es algo así como una hoja que sería
movida fatalmente al impulso de los vientos, según por donde éstos soplen; .no
es un pedazo de la naturaleza inserto en variados complejos de fuerzas ciegas;
no es un momento en una maquinaria que se mueve de modo inexorable en la Cadena
de la casualidad. Por el contrario, el hombre es un centro propio de acción,
sobre cuyas posibilidades pesan llamadas normativas.
Los valores, los
fines fundados en éstos, y las normas al servicio de dichos fines, son de varios
tipos:
Religioso. Moral. Jurídico. Del trato social decente o decoroso. Higiénico. Etc.
Lo normativo. Es decir, cualquier norma del
tipo que sea implica el suponer que entre las múltiples y muy variadas
posibilidades de comportamiento hay unas que son debidas, es decir, de
cumplimiento obligatorio, otras que están prohibidas, y otras que quedan como
libres, o sea como permitidas.
Cualquier
norma constituye una selección entre las posibilidades del comportamiento
humano, selección que se basa en un juicio de preferencia, y este juicio de
preferencia se funda, a su vez, en un juicio de valor.
En
los mecanismos biopsíquicos o psíquico-biológicos que existen en el hombre,
figuran 10 mismo tendencias, apetitos, impulsos hacia valores positivos, que
tendencias, apetitos e impulsos hacia desvalores o antivalores, figura tanto la
capacidad de amar como la de odiar; figura no sólo el deseo de elevación sino
también el de rebajamiento; figuran disposiciones constructivas y disposiciones
destructoras; alientan inclinaciones sociales y movimientos antisociales; laten
deseos de superación y de mejora, por una parte, y se dan, por otra parte,
también conformismos; existen resortes
de obediencia y afanes de rebeldía.
Los
valores pueden ser realizados por los hombres gracias a la existencia de los
mecanismos positivos. Sin embargo, para la realización de los valores es
necesario establecer y poner en movimiento controles que detengan y sometan las
tendencias negativas.
Sujetos que intervienen en la
relación del Control
Social:
a) Sujeto Activo: La sociedad o grupo dentro de ella que ejercen la presión o el control. Los sujetos que ejercen el control social se les denomina “Órganos de Control Social” y son: la Familia, el Estado, la Iglesia, los Partidos Políticos, la Prensa, etc.
b) Sujeto Pasivo: El individuo o grupo que recibe la presión para que adapte su conducta según los valores sociales. (Caso contrario al autocontrol del individuo).
a) Sujeto Activo: La sociedad o grupo dentro de ella que ejercen la presión o el control. Los sujetos que ejercen el control social se les denomina “Órganos de Control Social” y son: la Familia, el Estado, la Iglesia, los Partidos Políticos, la Prensa, etc.
b) Sujeto Pasivo: El individuo o grupo que recibe la presión para que adapte su conducta según los valores sociales. (Caso contrario al autocontrol del individuo).
Objetivos del Control Social: Lograr que los miembros que integran la sociedad
amolden su conducta según los lineamientos del grupo social. DURKHEIM,
considera “que la esencia de la vida del grupo social es que éste ejerce un
poder restrictivo o coercitivo sobre el Individuo, y por ello actúa como una
fuerza conservadora que limita las variaciones”.
El
Control Social-Antecedentes:
El
control social tiene en origen un sentido: fortalecimiento y supervivencia del
grupo. Las normas menores y las leyes son las
que conforman los grupos y es la implantación de una moral social por las
influencias sociales y al mismo tiempo la crítica como autodefensa y su interpretación es el
camino hacia el cambio social. Actúa sobre la desviación social (leyes) y
anomia (normas).
Funciones
Sociales del Derecho:
La
aceptación o rechazo de un comportamiento como una función del control social
es evaluado por las normas sociales, reguladas por este mecanismo con usos y
costumbres (sistema informal, que puede incluir prejuicios) y leyes (sistema
formal, que incluye sanciones). El control social es de personas o grupos hacia
personas y grupos a un nivel micro social, propicia un condicionamiento
negativo en la forma de crítica social normalmente de doble moral o puritana y
Estado y Organizaciones a un nivel macrosocial, siendo lo máximo el
Totalitarismo versus Democracia. Esta forma es más compleja al actuar sobre
todo el sistema social. La presión social
en uno u otro caso, provoca un auto control (pasivo) o auto defensa (activo),
por parte de los recipientes que lo perciben como peyorativo.
Mecanismos Internos de control social.
Normas
que surgen a partir de la conciencia, valores de las personas y ya existen en
sus actitudes espontáneamente. Normas Morales, Religiosas, Usos y
costumbres.
Mecanismos Externos de control social.
Son
aquellas normas impuestas por la sociedad que hacen ajustar nuestra conducta a
las pautas sociales. Normas Jurídicas.
Características
específicas del Derecho como Control Social
1.- La Coercibilidad: Esta característica ha sido definida como la posibilidad lógica de que la norma jurídica se cumpla, aún en contra de la voluntad del sujeto obligado. Es decir, que la persona que integra un grupo social sabe (o se presume que sabe) que si no cumple con lo establecido en dicha norma, se le aplicará la sanción jurídica respectiva, a través de la fuerza coactiva del Estado. Esta característica le da al Derecho la eficacia e importancia como forma de control social. Se puede afirmar entonces, que la coercibilidad es la coacción en potencia.
2.- La Sanción Jurídica: La sanción como consecuencia de la violación de una norma jurídica, cuenta con el apoyo del aparato coactivo del Estado para su ejecución, es decir, que goza de la coacción para hacerse cumplir. Las sanciones en los demás tipos de control social son ejercidas por la colectividad. Se puede decir que la coacción es la materialización de la posibilidad lógica contenida en la coercibilidad.
3.- Es un Control Social Complementario: Por cuanto entra en funcionamiento cuando los controles sociales persuasivos han sido insuficientes para lograr hacer cumplir determinadas normas sociales. Es decir, si los controles persuasivos fallan, la sociedad apelará al Derecho como la única forma de control social coactivo.
1.- La Coercibilidad: Esta característica ha sido definida como la posibilidad lógica de que la norma jurídica se cumpla, aún en contra de la voluntad del sujeto obligado. Es decir, que la persona que integra un grupo social sabe (o se presume que sabe) que si no cumple con lo establecido en dicha norma, se le aplicará la sanción jurídica respectiva, a través de la fuerza coactiva del Estado. Esta característica le da al Derecho la eficacia e importancia como forma de control social. Se puede afirmar entonces, que la coercibilidad es la coacción en potencia.
2.- La Sanción Jurídica: La sanción como consecuencia de la violación de una norma jurídica, cuenta con el apoyo del aparato coactivo del Estado para su ejecución, es decir, que goza de la coacción para hacerse cumplir. Las sanciones en los demás tipos de control social son ejercidas por la colectividad. Se puede decir que la coacción es la materialización de la posibilidad lógica contenida en la coercibilidad.
3.- Es un Control Social Complementario: Por cuanto entra en funcionamiento cuando los controles sociales persuasivos han sido insuficientes para lograr hacer cumplir determinadas normas sociales. Es decir, si los controles persuasivos fallan, la sociedad apelará al Derecho como la única forma de control social coactivo.
Por ello,
en una sociedad que exista una alta aceptación del orden social y la mayoría de
sus integrantes adapten su conducta a las normas sociales, el Derecho como
control social coactivo y complementario será utilizado con menos frecuencia,
aún cuando permanece latente, a la espera de cualquier situación que amerite su
utilización. En cambio, en aquella sociedad en la cual el respeto por el orden
social se ha ido perdiendo, será necesaria la utilización más frecuente del
Derecho y una presencia más palpable de la representación a través del aparato
coactivo del Estado.
Las
presiones colectivas.
Toda
realidad colectiva posee la característica de ejercer una presión sobre los
hombres que están expuestos en dicha realidad.
El
crecimiento de la presión colectiva sobre el individuo se produce en volumen y
con intensidad en los pueblos de regímenes totalitarios. Pero también sucede,
en los pueblos que viven en regímenes de libertad individual y de democracia.
Este
aumento de la presión colectiva se hace patente en muchos aspectos de la
realidad norteamericana y en otros países súper industrializados, y se hayan
decididos definitivamente en favor de la colectivización espiritual de la
persona humana.
En
las civilizaciones libres siguen vivas las convicciones en favor de los
derechos fundamentales del hombre.
Tipos de control social
Tipos de control social
Medios Formales
del Control Social
Son las
que se implementan a través de estatutos, leyes y regulaciones contra las
conductas no deseadas. Dichas medidas son respaldadas por
el gobierno y otras instituciones por medios explícitamente
coactivos, que van desde las sanciones hasta el encarcelamiento o el
confinamiento. Los medio formales son manifestaciones que tienen alto grado de
precisión y organización.
Se ejerce
por las instituciones que integran el sistema penal, Policía, Fiscalía y
Tribunales y los centros penitenciarios (control punitivo) está muy vinculado
al Derecho por cuanto se dirige a las personas que han vulnerado las normas
sociales e incurrido en conductas que han sido tipificadas por la ley como
delictivas. Sus agentes actúan de modo coercitivo e imponen sanciones
estigmatizantes que atribuyen al individuo el singular status de desviado, delincuente.
Este comienza a funcionar entonces cuando ya la instancia informal ha fallado.
Sus estrategias fundamentales son la prevención y la represión
Sin
embargo, también se puede clasificar el control social de acuerdo a la
actividad coactiva del Estado de la siguiente forma:
A.-
Control Social Persuasivo: es una
clase de control social que induce a los integrantes del grupo a adecuarse a
las normas establecidas, pero no cuenta para su cumplimiento con el apoyo del
aparato coactivo estatal. Se trata de persuadir o convencer por distintos medios
a los integrantes del grupo, para que actúen conforme a las normas del mismo.
Por ello se afirma, que se manifiesta de manera espontánea, a través de la
actuación de los diferentes órganos de control social que enumeramos con
anterioridad. Por ejemplo, la familia intenta transmitir los valores morales y
las costumbres a sus integrantes. Si esta institución social lograra su
cometido, se aliviarían muchos de los serios problemas sociales que
agobian a nuestro país.
B.-
Control Social Coactivo: es un
tipo de control social que cuenta con el aparato coactivo del Estado para
exigir que sean cumplidas las normas establecidas. En este sentido, el único
control social coactivo es el Derecho, por cuanto se produce una violación de
las normas jurídicas, se cuenta con el apoyo de la fuerza coactiva
del Estado para exigir su cumplimiento. Uno de los elementos esenciales del Estado,
es que éste goza del monopolio del uso
de la fuerza en una sociedad. Pues bien, ese ente denominado Estado está al servicio del
cumplimiento forzoso de las normas jurídicas.
En la
clase de controles sociales persuasivos, quedan todos los demás controles
sociales que se ejercen en la sociedad.
Medios
Informales del Control Social
Son aquellos que no están institucionalizados, se ejercen a través de
manifestaciones que no alcanzan un cierto grado de precisión y regularidad. No
hay una organización que nos permita jerarquizar autoridades creadoras de
dichas normas, así pues, tenemos como ejemplo las normas morales, la costumbre,
las reglas de trato social, la moda, entre otros. Éstas no tienen una
formalización a través de normas o leyes escritas, pero son más
importantes que los formales porque transmiten hábitos, normas y valores
determinados.
Éstos no tienen carácter estatal u oficial, de ahí
su carácter informal.
·
La
familia.
·
La
escuela.
·
La religión.
·
Las
organizaciones de masas.
·
Los
grupos informales y la comunidad.
Mecanismos y estrategias del control
social expresados a través del medio televisivo.
La
sociedad utiliza distintos tipos de mecanismos para lograr la aceptación de las
normas éticas, sociales y jurídicas por los individuos, ellos son: las
instituciones, las estrategias y las sanciones (éticas, sociales y jurídicas)
que se imponen a los ciudadanos cuando han violado los niveles normativos, con
el objetivo de reprimir estas conductas y evitar que el resto de los miembros
de la sociedad comentan hechos similares.
Las estrategias a través de las cuales se
manifiesta el control social:
Es el término
usado para manifestar la conducta de uno o varios sujetos que conforman la
sociedad que violan lo que su entorno espera normalmente de ellos según ciertas
normas sociales establecida, la desviación social “es definida normalmente como conducta que viola
normas y expectativas de
cualquier sistema social
o modo de dominación y ante la cual éste
reacciona con un dispositivo de control específico”.
Tipos de Desviación
Social
Es necesario tener en cuenta una serie de
filosofía o pensamiento del estudio de la desviación; es complejo porque
existen tantos tipos de violación de las reglas como normas y valores sociales.
Respetando otros tipos de normas en la creencia consciente de que el
comportamiento que implican está justificado, por ejemplo, las normas de
tráfico, conducir por la derecha, respetar los semáforos, todo esto se acepta
porque si la mayoría no se atuviera a dichas reglas, la conducción sería mucho
más peligrosa de lo que es en la actualidad. Todas las normas sociales van
acompañadas de sanciones que protegen contra la no conformidad. Una sanción es
cualquier tipo de reacción de otros ante el comportamiento de un individuo o
grupo y cuyo objetivo es asegurar que se cumple una norma concreta. Los tipos
de desviaciones: son las sanciones pueden ser:
• Positivas (ofrecer recompensas
por la conformidad, es decir, Acciones contrarias a lo que se espera según el
estatus del individuo)
• Negativas
(castigos por un comportamiento no conformista que es el resultado de acciones
contrarias a la ley, al orden y a los valores) y que le dan carácter formales o
informales.
Las sanciones informales positivas o negativas son un rasgo común de todos los contextos de la actividad social, las de tipo positivo incluyen desde decirle a alguien “bien hecho” o sonreírle. Por el contrario, las sanciones informales negativas incluyen el insulto, el regañar o la agresión física. Aunque las sanciones formales son normalmente más visibles que las informales, estas tienen una importancia decisiva para asegurar la conformidad a las normas. Clasificando estas normas y partiendo del concepto de desviación que podríamos optar por la Positivas (ofrecer recompensas por la conformidad) o Negativas (castigos por un comportamiento no conformista).
Las sanciones informales positivas o negativas son un rasgo común de todos los contextos de la actividad social, las de tipo positivo incluyen desde decirle a alguien “bien hecho” o sonreírle. Por el contrario, las sanciones informales negativas incluyen el insulto, el regañar o la agresión física. Aunque las sanciones formales son normalmente más visibles que las informales, estas tienen una importancia decisiva para asegurar la conformidad a las normas. Clasificando estas normas y partiendo del concepto de desviación que podríamos optar por la Positivas (ofrecer recompensas por la conformidad) o Negativas (castigos por un comportamiento no conformista).
Aspectos negativos de la desviación
social.
Si
la desviación no es controlada a tiempo, puede ser
destructiva para una sociedad afectando el funcionamiento de una actividad,
puede destruir la voluntad de las personas para
desempeñar su roll diario y puede ocasionar la pérdida de la confianza
en las instituciones, las reglas y normas que hacen que una sociedad funciones. Un ejemplo negativo de desviación
social son las leyes que permiten
ingresar a nuestro país a todo extranjero sin necesidad de VISA, esto provocó que al
Ecuador ingresen prófugos de la ley de sus países
que al no haber control se mezclan con las personas que realmente vienen en
búsqueda de oportunidades, a invertir en el país o los que huyen de la
violencia de sus países, el infractor de la ley
se burla de justicia, se queda sin
castigo y vive sin rendir cuentas a
la ley y la víctima pierde la confianza en las leyes y
los reglamentos, lo cual repercute en la sociedad en
general. Los padrinazgos serían otro claro donde se
premia a ciertas personas únicamente por tener relación con los jefes
o socios de una entidad, esto destruye la voluntad de la
personas para obedecer las normas. Se crea un clima de injusticia
en donde se piensa que no vale la pena ser honesto, integro, trabajador y
respetuoso de las leyes.
Aspectos positivos de la desviación
social.
La desviación
no siempre es destructiva para la sociedad, las normas y leyes
provienen de la experiencia y sabiduría de la vida en comunidad pero el ser
humano tiene personalidad propia, es un ser racional y pensante y sería un
error asumir que estará conforme durante
toda su vida con todas las
reglamentaciones impuestas por los gobernantes y otras instituciones sociales. Por
naturaleza en el hombre siempre existirá la
desviación por que no existe una sociedad tan perfecta
que el 100% de sus habitantes estén totalmente de
acuerdo con las normas sociales y legales. No siempre las normas y
leyes son claras y precisas. Recuerden que son redactadas y puestas en
vigor por seres humanos, que pueden cometer errores al tratar de
imponer sus criterios subjetivos, valores y creencias o generar controversias
que conlleven acciones judiciales ante los tribunales. Interpretar
las leyes es una función judicial. Los jueces intervienen cuando
un ciudadano viola una ley. Si en ese caso en particular surge la
oportunidad de clarificar una norma jurídica, se establece un
precedente, de modo que la conducta
incurrida por el desviado sirve de modelo
para los demás. La desviación también hace del conformismo
una fuente de gratificación personal. Cuando censuramos la conducta de los
demás nos sentimos orgullosos de no ser los desviados.
También sirve
para llamar la atención sobre los defectos de la vida en sociedad: el
aumento del crimen y la delincuencia, la deserción escolar, el alcoholismo y
las drogas, la violencia familiar, el desempleo, la pobreza y otros males
sociales que son catalogados como desviados, en algunos casos
criminalizados, y que obligan a los gobernantes a buscar soluciones
que reestablezcan el orden social.
La
eliminación del machismos el hecho que las mujeres realicen actividades
catalogadas como exclusivas para hombres es una muestra positiva de desviación
social que fomenta el cambio social de forma positiva al ver que todos tenemos
las mismas capacidades para realizar toda actividad.
El ritualismo reflejado en
algunos países asiáticos donde los matrimonios son
obligados, por cultura las mujeres no pueden escoger a su esposo o
deben compartirlo con otras esposas, este hecho es considerado normal pero en
nuestra cultura y con la difusión de los
derechos humanos y de nuevas ideologías y libertad
de elección este hecho se está terminando pero al principio
fue considerado como un gran hecho de desviación social que era castigado
duramente.
Indicadores de una conducta desviada.
Debe haber una violación de las
normas sociales; ya sean de convivencia, del derecho o la moral.
· Esa violación debe tener implícito un daño, que puede ser para consigo mismo o para los demás.
· Estas conductas deben ser mantenidas.
· Debe haber una concientización por parte del sujeto de que su conducta no es aceptada socialmente.
· Esa violación debe tener implícito un daño, que puede ser para consigo mismo o para los demás.
· Estas conductas deben ser mantenidas.
· Debe haber una concientización por parte del sujeto de que su conducta no es aceptada socialmente.
Factores que explican la desviación social.
Biogenético. El
criminalista Italiano Cesare Lembroso, que trabajo en la década de 1980, creía
que se podía identificar las clases de delincuentes por la forma del Cráneo.
Psicológico. La
explicación psicológica se basa en los rasgos personales del individuo.
Para Sigmund Freud el comportamiento es controlado por pensamientos
subconscientes y no por voluntad propia del individuo.
Stanton Samenow
y Samuel Yochelson elaboraron la
teoría de la personalidad criminal en que el individuo desviado posee un patrón
de pensamiento con el que se siente superior ante los demás y no siente empatía
por la responsabilidad y el respeto, entre otros.
Sociopsicológico. Las teorías psicosociales enfatizan las variables que emergen como
resultado de las interacciones de la persona con otros miembros de la sociedad.
La teoría del aprendizaje social elaborada por Albert
Bandura establece que los niños imitan las conductas desviadas que observan
de sus padres o de los medios a nivel cotidiano y la aplican en su
comportamiento.
Edwin Sutherland elaboró la teoría de la asociación diferencial en la que explica que
“una persona aprenderá a violar las reglas al asociarse más con personas que
viola las reglas que siguen las reglas”.
La teoría del etiquetamiento afirma que la conducta delictiva es el resultado del proceso
de “rotulación” o “etiquetamiento” que efectúa la misma sociedad, y no una
enfermedad o degradación de ella.
El sociólogo
francés Emile Durkheim, fue el
pionero de la teoría de la Desviación Social. Formulo el término anomia¨ o
debilitamiento de la moralidad común.
Anomía = Ausencia de Ley.
La anomía,
cuyo sentido literal sería de ¨ausencia de ley¨, hace referencia en realidad a
una situación en la que existe un conflicto de normas, de manera que el sujeto
no sabe cómo actuar.
Tipos de Desviación Social.
· Alcoholismo
· Delincuencia y Criminalidad.
· Practicas Mágicas y Ludomanías.
· Alcoholismo
· Delincuencia y Criminalidad.
· Practicas Mágicas y Ludomanías.
Las causas para que se incurra en un comportamiento
desviado, como los mencionados arriba, son de distinta índole en dependencia
del entorno que circunde al individual.
Características de la Desviación.
• Lo que se entiende como conducta desviada
varía según cuáles sean las normas sociales de la sociedad en la que vivimos;
esto es, la desviación se define en relación a algo que tomar como parámetro, y
este algo son pautas culturales específicas que son distintas en sociedades
distintas.
• Solo cuando los demás la definen así, la
conducta de uno es una conducta desviada; todos los individuos saltamos muchas
normas culturales con regularidad, en ocasiones hasta el punto de quebrantar la
ley. El que terminemos catalogados como unos locos o unos ladrones no depende
de sí, sino de cómo otras personas entienden y definen esas conductas.
• La capacidad de elaborar reglas, así como de quebrantarlas, no está igualmente distribuida entre la población; por ello para Marx, la ley es poco menos que una estrategia con la que los poderosos protegen sus intereses. Los ejemplos son infinitos, un vagabundo que se ponga en una esquina a criticar el sistema de gobierno, puede ser arrestado por escándalo público, pero un político que haga lo mismo, seguro que no.
• La capacidad de elaborar reglas, así como de quebrantarlas, no está igualmente distribuida entre la población; por ello para Marx, la ley es poco menos que una estrategia con la que los poderosos protegen sus intereses. Los ejemplos son infinitos, un vagabundo que se ponga en una esquina a criticar el sistema de gobierno, puede ser arrestado por escándalo público, pero un político que haga lo mismo, seguro que no.
Teorías Explicativas de la Desviación Social
Teorías Presociológicas de la Desviación.
• Teoría clásica.
Se denomina Teoría Clásica
de la desviación a los esfuerzos teóricos del iluminismo por dar una definición
objetiva del delito y de la pena que sustituyese la concepción relativista y
arbitraria característica del Antiguo Régimen. Esta objetivización del delito
era imprescindible para construir el Estado de derecho —base del Estado
liberal— ya que es un prerrequisito necesario del principio de legalidad, la
seguridad jurídica o la igualdad ante la ley.
El
autor más representativo fue Cesare Beccaria, que desarrolló sus ideas en un
libro que se ha convertido en un clásico del Derecho: De los delitos y las
penas, en el que, en palabras del propio autor, se incluyen:
Los
presupuestos para una teoría jurídica del delito y de la pena [...] en el
cuadro de una concepción liberal del Estado de derecho, basada sobre el
principio utilitarístico de la máxima felicidad para el mayor número de
personas y sobre la idea del contrato social.
• Enfoque Biológico.
Uno
de los primeros intentos para entender de manera científica el fenómeno de la
desviación se hicieron desde el ámbito de la Biología. Durante el siglo XIX se
desarrollaron diversos estudios para intentar descubrir cuáles eran las
características físicas que convertían a las personas en desviadas. La idea de
poder explicar la conducta delictiva en base a rasgos biológicos tiene
interesantes precedentes en algunas legislaciones medievales, en las que se
recomendaba a los jueces que dudasen entre dos sospechosos eligiesen a los más
feos y deformes. En 1876, el médico penitenciario Cesare Lombroso elaboró una
detallada teoría sobre las características físicas que provocaban la
delincuencia. Los rasgos físicos descritos eran básicamente simiescos: vello
abundante, brazos largos, frente estrecha, mandíbula prominente, etc.
Aunque
los estudios de Lambroso alcanzaron una gran notoriedad en su época, el
determinismo biológico, tras las sucesivas críticas, fue cayendo en desuso
hasta mediados del siglo XX, cuando Willians Sheldon realiza un estudio con
cientos de jóvenes en el que llega a conclusiones similares. Para Sheldon
existen tres tipos básicos de constitución física — endomorfo, mesomorfo y
ectomorfo — a los que corresponden tres personalidades diversas, siendo los
mesomorfos — con constitución musculosa y atlética — los más predispuestos a
delinquir. Los datos de Sheldon fueron reanalizados por Eleonor Glueck llegando
a la conclusión de que no puede afirmarse que la constitución atlética sea un
buen predictor de la delincuencia, y muchos menos su causa.
Desde los
años 80 se está dando una revitalización del enfoque biológico, basada en los
avances de la genética. En este ámbito se han hecho particularmente populares
los estudios sobre el Síndrome del XYY —una anomalía cromosómica por la que el
varón recibe un cromosoma Y extra— que algunos autores relacionan con una
tendencia a la violencia, aunque numerosos estudios han confirmado que esto no
se observa con frecuencia.
Los teóricos funcionalistas se vieron ante la tarea de hallar respuesta a la necesidad, por parte de algunos individuos, de no cumplir las reglas. El primero en describir algunas de las funciones sociales que cumplía la desviación fue Emile Durkheim. Aunque parezca contradictorio, para Durheim la desviación contribuye a consolidar los valores y las normas culturales, ya que es parte indispensable en el proceso de creación y mantenimiento del consenso sobre las mismas. La base de esta idea es que sin el delito no hay justicia ni es posible por tanto el consenso sobre las ideas del bien y el mal. En este sentido la desviación contribuiría a definir los límites morales. Definiendo a algunos como desviados el resto de la sociedad puede observar claramente el límite entre el bien y el mal. Otra función de la desviación sería el fomento de la unidad social, ya que la respuesta unitaria frente a las acciones extremas de desviación — asesinato, atentados — fortalece el lazo social. Por otro lado la desviación también contribuiría al cambio social, ya que el transgredir una norma invita a reflexionar sobre la necesidad o la conveniencia de ésta, y representa un modelo de conducta alternativo que puede llegar a convertirse en mayoritario, ya que lo que hoy es una conducta desviada puede no serlo en el futuro.
Teorías Macrosociológicas de la Desviación.
• Teoría Funcionalista.
Los teóricos funcionalistas se vieron ante la tarea de hallar respuesta a la necesidad, por parte de algunos individuos, de no cumplir las reglas. El primero en describir algunas de las funciones sociales que cumplía la desviación fue Emile Durkheim. Aunque parezca contradictorio, para Durheim la desviación contribuye a consolidar los valores y las normas culturales, ya que es parte indispensable en el proceso de creación y mantenimiento del consenso sobre las mismas. La base de esta idea es que sin el delito no hay justicia ni es posible por tanto el consenso sobre las ideas del bien y el mal. En este sentido la desviación contribuiría a definir los límites morales. Definiendo a algunos como desviados el resto de la sociedad puede observar claramente el límite entre el bien y el mal. Otra función de la desviación sería el fomento de la unidad social, ya que la respuesta unitaria frente a las acciones extremas de desviación — asesinato, atentados — fortalece el lazo social. Por otro lado la desviación también contribuiría al cambio social, ya que el transgredir una norma invita a reflexionar sobre la necesidad o la conveniencia de ésta, y representa un modelo de conducta alternativo que puede llegar a convertirse en mayoritario, ya que lo que hoy es una conducta desviada puede no serlo en el futuro.
• Teoría Marxista.
Aunque ya desde sus inicios el marxismo había tratado temas relacionados con la desviación, es en los años 70 cuando aparecen obras sistemáticas sobre ésta desde una perspectiva marxista. Autores destacados en esta sistematización fueron Iain Taylor, Paul Walton y Jock Young, que argumentaron que las teorías existentes obviaban ciertos factores estructurales, como la desigual distribución del poder y la riqueza, que eran fundamentales para entender las conductas desviadas.
Este
argumento fue posteriormente desarrollado por Steven Spitzer, que ejemplificó
ampliamente cómo las personas que son etiquetadas como desviadas suelen ser
sujetos que obstaculizan el desarrollo del Capitalismo. Spitzer analizó cómo
los sujetos que amenazan la propiedad privada, base del capitalismo, son
siempre calificados como desviados; sin embargo, los actos de las clases
privilegiadas contra los intereses de las subordinadas, como una gran subida
del precio de la vivienda, lejos de considerarse desviadas, son asumidas como
una legítima defensa de sus intereses. También analiza cómo, al ser la
explotación del trabajo otro de los fundamentos del capitalismo, quien no
trabaja, sea por imposibilidad —minusválidos, parados involuntarios —, sea por
voluntad, tiene muchas posibilidades de ser etiquetado como desviado. Ejemplos
de esto los encontramos en la legislación contra vagos y maleantes.
• Teoría de la subcultura.
Esta
teoría se basa en el principio de que la conducta desviada — al igual que el
resto de conductas — se aprende en el ambiente en que se vive. Los actos
desviados serían por lo tanto una consecuencia de la socialización en ambientes
con valores y normas distintos a los de la sociedad en general. La teoría fue
elaborada por Clifford Shaw y Henry Mckay y tiene su origen en los estudios
etnográficos realizados por la Escuela de Chicago durante los años veinte. Los
investigadores dividieron la ciudad de Chicago en cinco zonas, realizando
círculos concéntricos y comparando la tasa de delincuencia y la relación entre
el número de delincuentes y el total de la población de cada zona. Los datos
evidenciaron que el valor de la tasa disminuía conforme se alejaba del centro,
y lo que es más interesante, que entre 1900 y 1920 la relación entre las tasas
de delincuencia de cada zona permaneció invariable, a pesar de que en este
periodo hubo grandes movimientos de población que cambiaron la composición
étnica de cada zona. Estos hechos hicieron llegar a los investigadores a la
conclusión de que la subcultura desviada formaba parte de la idiosincrasia de
algunos barrios, por lo que era trasmitida a los nuevos habitantes.
Numerosos
investigadores han desarrollado la teoría, comprobando que es común que los
individuos con comportamientos desviados pertenezcan a grupos en las que estas
conductas son permitidas — o incluso prescritas — por lo que tal conducta solo
podría juzgarse como desviada respecto a las normas y valores de la sociedad,
pero no respecto a las de su grupo de referencia. Respecto a esto el
criminólogo Edwin Sutherland escribiría que:
La cultura criminal es tan real como la legal, y mucho más
difundida de lo que se piensa habitualmente.
Edwin Sutherland
Walter Miller estudió cómo se crean las subculturas de la
desviación, llegando a la conclusión de que éstas suelen aparecer entre los
jóvenes de clase baja, ya que son los que tienen menos posibilidades de cumplir
sus aspiraciones por medios legítimos. Miller además individuó las
características de estas subculturas, cuyos principales rasgos serían: La rutinización del conflicto, la
dureza, la sagacidad y la autonomía.
Teorías Microsociológicas de la Desviación.
• Teoría del Etiquetaje.
Artículo
principal: Teoría
del etiquetado
En los años 1960 se empieza a estudiar
la desviación desde la perspectiva del interaccionismo simbólico. Estos autores
centran sus estudios no tanto en las posibles causas de la conducta desviada,
sino en las formas de control e interacción social por las que se definen a
ciertos individuos como desviados. La principal aportación teórica de esta
escuela es la teoría del etiquetaje,
que podría sintetizarse así:
Los grupos sociales crean la desviación estableciendo reglas
cuya infracción constituye una desviación, y aplicando estas reglas a personas
particulares, que etiquetan como outsiders
[...] La desviación no es una cualidad de la acción cometida sino la
consecuencia de la aplicación — por parte de otros — de reglas y sanciones. El
desviado es alguien al que la etiqueta le ha sido puesta con éxito; el
comportamiento desviado es el comportamiento etiquetado así por la gente.
Howard Becker.
Una
de las aportaciones fundamentales de esta teoría es la distinción entre desviación
primaria y secundaria realizada por Edwin Lemert. Dentro de la primaria se
encuadrarían los incumplimientos de las normas que no hacen sentirse desviado a
quien lo comete, ni es visto así por los demás. Dentro de la secundaria
estarían por el contrario los incumplimientos que hacen cambiar la concepción
que los demás tienen del autor, etiquetándolo como desviado. Este
etiquetamiento provocará que el autor reorganice la percepción de sí mismo
asumiendo la nueva definición que los demás dan de él. La base de esta
distinción está en el hecho de que, en realidad, prácticamente todo el mundo ha
cometido actos desviados. Es difícil encontrar a alguien que no haya mentido,
cometido algún pequeño robo o consumido alguna droga ilegal, pero pocas de
estas personas son catalogadas — o autocatalogadas — como mentirosos, ladrones
o drogadictos.
La desviación secundaria está muy relacionada con el
concepto de estigma
desarrollado por Erving Goffman, definido como una marca social negativa usada
para definir a una persona. El estigma se convierte en un rol dominante del
individuo y todos los actos pasados empiezan a reinterpretarse bajo la
perspectiva del nuevo estigma, en un proceso de distorsión biográfica conocido
como etiquetaje retrospectivo. Goffman desarrolló la posibilidad de que al
estigmatizar a alguien — con mayor o menor motivo — se activasen una serie de
mecanismos, como el rechazo social, que le impulsaran a buscar compañía entre
quienes no le censuran — otros estigmatizado — reforzando así la identidad desviada
e impulsándolo a continuar su carrera delictiva. De este modo la desviación
podría ser una de esas profecías autorealizadas que Robert K.
Merton elaboró basándose en el
Teorema de Thomas.
• Teoría de la Elección racional.
Los teóricos de la elección racional, también llamados neoclásicos, enmarcaron la desviación
dentro de su modelo general de conducta, según el cual las acciones de las
personas están guiadas por un frío
racionalismo cuyo objetivo es calculado para obtener placer y evitar
dolor. Aunque posteriormente fue asumida por algunos sociólogos esta teoría fue
desarrollada en sus inicios por economistas, como Gary Becker que elaboró el modelo económico del crimen que
describe una conducta desviada guiada por el cálculo de utilidad relativa en la
que se ponen en una balanza los costes y los beneficios que puede tener tal
conducta. Estudios posteriores han intentado localizar cuáles son los costes y
beneficios concretos de las conductas desviadas, llegando a la conclusión de
que los beneficios serían los comunes a todas las acciones — lucro, prestigio,
poder, placer — mientras que los costes pueden dividirse en tres: las sanciones
formales impuestas por el Estado, las sanciones sociales de su entorno y las
autosanciones que el desviado se imponga, como vergüenza o sentimiento de
culpa, debido a la interiorización de las normas.
La teoría de la elección racional también ha realizado
varios estudios sobre la eficacia de las sanciones. Según el modelo teórico,
una forma de reducir el delito sería aumentar los costes de su realización, por
ello desde esta teoría se propuso aumentar la severidad de las penas. Estudios
posteriores desde esta perspectiva han puesto de manifiesto que la severidad de
la sanción tiene repercusiones irrelevantes, mientras que por el contrario, la
certeza de la pena — la convicción de que existirá una sanción — puede influir
en la reducción de la delincuencia.